Por Bernabé Vallejo Olvera

TUXPAN, VER.-  Al continuar con las investigaciones en torno a los violentos acontecimientos de una balacera entre civiles armados y representantes del orden público donde dos personas, perdieran la vida, cinco resultaran lesionadas y 11 fueran detenidas el pasado Jueves 06 de Marzo

Entre los detenidos, fue ubicada una persona del sexo masculino cuyos familiares; lo habian reportado como desaparecido en Huasca de Ocampo, Hidalgo, resultando cómo integrante de una célula delictiva, que venía operando en la zona norte del Estado.

Familiares de Gerardo Lugo Godinez quienes habian reportado a las autoridades del Estado de Hidalgo, sobre la desaparición de este joven, siendo publicada la respectiva ficha de búsqueda y boletinándolo en redes sociales.

Su desaparición, era para desorientar; que era integrante de un grupo de sicarios, cuáles fueron detenidos minutos despues de generar violencia en la ciudad.

Asi como los homicidios de una persona civil y un Comandante de la Policía Ministerial.

Desaparece comunicador tras ser levantado por comando.

Poza Rica, Ver.-Un hombre identificado como Alan N., quien viajaba a bordo de su motocicleta, fue víctima de un secuestro en la colonia Halliburton, sobre la calle Cuauhtémoc, cuando presuntamente fue interceptado por sujetos desconocidos, en un hecho ocurrido este lunes por la tarde.

Testigos del suceso aseguran que Alan N., quien también es comunicador y trabajador de Petróleos Mexicanos (Pemex), estaba llegando a su domicilio cuando fue abordado y, de manera violenta, subido a un vehículo por los presuntos captores, quienes lo trasladaron con rumbo desconocido.

Este hecho activó de inmediato el Código Rojo, que movilizó a las autoridades de los tres niveles de gobierno en un operativo para localizar al comunicador y dar con el paradero de los responsables. Sin embargo, hasta el momento, no se ha confirmado ningún resultado positivo sobre la situación de Alan N. ni sobre el avance en la investigación.

Las autoridades locales han mantenido silencio respecto al caso, y la comunidad se encuentra preocupada por la seguridad del hombre y por la impunidad que sigue rodeando este tipo de hechos.

El gobierno de Joe Biden justificó esta medida porque los sistemas y componentes de estos vehículos podrían suponer una amenaza en la mayoría de los autos presentes en Estados Unidos

Los Estados Unidos vetaron la venta e importación de automóviles conectados, así como sus componentes de hardware y software, procedentes de China y Rusia por la «amenaza» que suponen para la seguridad nacional, informó el Gobierno estadounidense.

En un comunicado, la Casa Blanca señaló que el Departamento de Comercio emitió su normativa definitiva «que prohibirá la venta e importación de sistemas de hardware y software de vehículos conectados así como de vehículos completos procedentes de China y Rusia».

El gobierno de Joe Biden justificó la medida porque «la presencia en las cadenas de suministro de adversarios extranjeros» hacen que los sistemas y componentes de estos vehículos (desde wifi, bluetooth o conexión por satélite) supongan una «significante amenaza en la mayoría de los autos presentes en la carretera hoy día». La prohibición también afecta a los sistema de conducción autónoma.

Las restricciones a la importación de software, así como el veto a la venta de automóviles completos, empezarán a ser aplicadas en los vehículos del año de modelo 2027, mientras que las prohibiciones al hardware, a los del año de modelo 2030.

La prohibición fue apoyada por la Alianza para la Innovación en el Automóvil, del que forman parte los principales fabricantes de automóviles en Estados Unidos, como General Motors (GM), Ford, Kia o Stellantis, así como productores del sector de alta tecnología (LG, Texas Instruments o Basf).

John Bozzella, presidente del grupo, declaró en un comunicado: «el sector del automóvil comunicó nuestro apoyo a la normativa final que responde a riesgos inaceptables asociados con la tecnología de información y comunicación y servicios diseñados, desarrollados, fabricados o suministrados por adversarios enemigos como China y Rusia».

El Gobierno de Estados Unidos también resaltó que la prohibición protegerá el «vital» sistema de transporte del país al asegurar que «no está expuesto al riesgo de cadenas de suministro controladas por adversarios extranjeros que podrían proporcionar a agentes malignos con los medios para perturbar infraestructura crítica de Estados Unidos».